Si hay algo que tenemos claro desde los orígenes del fútbol es que este deporte no deja de evolucionar. Un conocido de uno de los fundadores del club era dueño de un negocio textil y debido al exceso de tejido amarillo que quedaba después de un trabajo, pudo equipar al equipo formativo (entonces conocido como Sociedad Española de Fútbol) en el color.